CONSUELO TOMÁS
BIOGRAFÍA DE LA POETA CONSUELO TOMÁS
Consuelo Tomás Fitzgerald, nació en la Isla Colón, provincia de Bocas del Toro, Panamá, el 30 de agosto de 1957.
Poeta, narradora, comunicadora, actriz de teatro para títeres. Ha ganado premios nacionales de poesía y cuento y participado como invitada a una pluralidad de encuentros literarios en España, Centroamérica, Alemania, Argentina, Cuba, Puerto Rico, México, Colombia, República Dominicana. Parte de su obra ha sido publicada en revistas nacionales e internacionales y traducida al inglés, francés, holandés, sueco, alemán, rumano, portugués y bengalí.
Egresada del Colegio Nuestra Señora de Bethlem, en 1975. Obtuvo una licenciatura en Trabajo social por la Universidad de Panamá, en 1984.
Formó parte del colectivo musical taller sonoro Demetrio Herrera Sevillano y del Frente de Trabajadores de la Cultura. Fundó junto con Miriam Augusto la compañía de teatro y títeres Cataplún, donde se desempañó como actriz, autora de canciones y co-autora de guiones y adaptaciones. Fue integrante del colectivo cultural El Grupo y coordinadora del colectivo de poetas jóvenes La otra columna. Fue editora del plegable Temas de Nuestra América.
Participó en la organización del Centro de Imagen y Sonido (CIMAS). Laboró como co-editora y articulista de la revista Este país y como parte del colectivo de corresponsales de la revista Pensamiento propio de Nicaragua, y fue editora de la revista Década.
En 1988 formó parte del colectivo fundador de la Asociación Cultural AlterArte, de promoción cultural. Es miembro de la Comunidad Centroamericana de Escritores.
Sus obras han merecido múltiples reconocimientos: Primer premio del Concurso Literario Obrero del IPEL, en 1979. Mención honorífica en el Torneo de Poesía Verano 1982. Degundo premio en el Concurso de Poesía “Gustavo Batista Cedeño”, en 1992.
Ha ganado el Concurso Literario Ricardo Miró en casi todas sus categorías: en 1994, con su obra Agonía de la reina, gana la sección poesía y ese mismo año con su obra Inauguración de la fe gana la sección cuento, en el 2003 recibe Mención honorífica por su obra Evangelio según San Borges en la sección teatro y en el 2009 gana la sección novela con su obra Lágrima de dragón.
Parte de su poesía aparece en las antologías: Ixok-Amargo (inglés-español) publicada en los Estados Unidos y en Antología de poesía hispanoamericana publicada por la Editorial Revista Mairena de Puerto Rico.
Además de su obra, ha publicado diversos artículos en revistas como: Temas de Nuestra América, La otra columna, Década, Maga, entre otras. En la actualidad, labora como productora de programas de radio en la emisora Crisol FM del Sistema Estatal de Radiodifusión de Panamá, SERTV.
Fragmentos de la entrevista:
. Entrevistadora: ¿Crees en la literatura de compromiso?
Consuelo Tomás: Pienso que toda la literatura es de compromiso. El acto de escribir es por sí mismo un compromiso: con el arte, con la gente, con la época.
. Entrevistadora: La revisión de su poesía refleja constantes denuncias contra el imperialismo.
Consuelo Tomás: Más que denuncia es una renuncia. ¿A qué se renuncia? A quedarse callado cuando las cosas no son como deben ser, se renuncia a ocupar un cómodo lugar en la literatura que es bella, pero que no refleja la injusticia. Recordemos que la función de la literatura es tocar las llagas, romper, causar impacto. Cuando escribo me rebelo contra lo establecido, las poesías surgen porque están dentro de mí y mi deber es decirlo.
En poesía es difícil denunciar sin que parezca un panfleto.
. Entrevistadora: La participación cuantitativa de la mujer en la actividad literaria panameña es reducida. ¿Hay discriminación o se trata de una tradición aún no superada?
Consuelo Tomás: En principio pienso que es un poco de cobardía por parte de muchas mujeres que escriben bellísimo, pero que tienen temores de publicar. Se avergüenzan de mostrar sus creaciones, de proclamar sus sentimientos. Desde que se hizo el reparto de los roles a la mujer se le dijo: La palabra no/la palabra es de él. Tú a lo tuyo. Entonces las mujeres lo asumieron con resignación, y es un trauma que no han superado. Se han callado.
. Entrevistadora: ¿Qué respuesta necesita un escritor para sentirse reconocido socialmente?
Consuelo Tomás: En principio que se le pague bien por su obra… Los estímulos tienen que verse en función del trabajo personal y reconocer que escribir es un oficio. Y cuando se le pida colaboración a los poetas para participar en un recital, en una conferencia, se le pague.
.Entrevistadora: ¿Te definirías como una poetisa libre de huellas y tatuajes de otros escritores?
.Consuelo Tomás: Libre de huellas… ¡jamás! Los poetas que me acompañaron en mi camino de formación: Vallejo, Roque Dalton, Otto René Castillo siempre me acompañan. Los siento en mi oreja y me dicen: “no lo hagas así… no escribas así…” Me halan siempre la oreja. Definitivamente no quiero librarme de ellos, pero tampoco pretendo hacer fotocopias de su obra, pero reconozco que los necesito en mi cuerpo.
Obras de Consuelo Tomás
.Y digo que amanece. Antología del Premio IPEL, Panamá. 1979
.Ciudad de Sal. Revisa Imagen. 19??
.Confieso estas ternuras y estas rabias. Ediciones Formato Dieciséis, Panamá.1983
.Las preguntas indeseables. Ediciones Formato Dieciséis, Panamá. 1984
.Cuentos rotos. Editorial Mariano Arosemena, INAC, Panamá. 1991
.Motivos generales. Editorial Búho, República Dominicana. 1992
.Apelaciones. 2do. Lugar del premio Gustavo Batista 1992. Publicado en el libro colectivo Premio de Poesía ‘Gustavo Batista Cedeño’ 1992. Editorial Mariano Arosemena, INAC, Panamá. 1993
.Agonía de la reina. Premio Ricardo Miró 1994, sección poesía. Editorial Mariano Arosemena, INAC, Panamá 1995
.Inauguración de la fe. Premio Ricardo Miró 1994, sección cuento. Editorial Mariano Arosemena, INAC, Panamá. 1995
.El cuarto Edén. Epic Publications, Panamá. 1995
.Libro de las propensiones. Colección de poemas en postales armables. Imprenta Boski, Panamá. 2000
.Evangelio según San Borges. Mención honorífica Ricardo Miró. 2003, sección teatro. Editorial Mariano Arosemena, INAC, Panamá. 2005
.Pa’na’má quererte. Relatos. Impresora Pacífico, Panamá. 2007
.Darién, libro de viaje. Recreación literaria. 2007
.Lágrima de dragón. Premio Ricardo Miró. 2009, sección novela. Editorial Mariano Arosemena, INAC, Panamá. 2010
Bibliografía consultada sobre la poeta Consuelo Tomás
http://www.antoniomiranda.com.br/iberoamerica/panama/consuelo_tomas.html
https://panamapoesia.com/pt59.php
POEMAS DE LA POETA CONSUELO TOMÁS
Cl
ALEGORÍA DEL IMPERIO
Hoy
ciertos enanos mentales
juegan a las cartas
en medio
de una mortandad de niños
sus esposas
ven Miss Universo vía satélite
y aprenden a exhibir los muslos
entre preguntas inodoras
sus hijos
aprenden inglés
para aspirar a Disney world
antes de los quince
y a Harvard
después de los dieciocho
Hoy ciertos enanos mentales
duermen con un ojo abierto
puesto en la caja de metal
donde descansan
en ocho y medio por once
los planes
para matar el continente.
Del libro Confieso estas ternuras y estas rabias
A
CONFIESO ESTAS TERNURAS
Confieso estas ternuras
porque te he conocido
vertical sobre la tierra
y he amado tu ser de hombre a tiempo
y tu paso de gacela
herida de razones.
Confieso estas ternuras
porque te he visto crecer
en tus ojos como pájaros
volando de una idea a otra
en la tormenta
para encontrar el camino de todos
tu afán de no morir
enredada entre tus dedos
tu voz
con la canción de quién se entrega
total
a la tarea de amor entre los hombres.
Confieso estas ternuras
porque he caminado la ruta de tu alma
y he encontrado
las señales del asombro.
Del libro Confieso estas ternuras y estas rabias
N
SEMEJANZA
Cuando estás conmigo
soy
como la piel de un poema
escrito al amanecer
con todas las esperanzas
y todos los sueños.
Del libro Confieso estas ternuras y estas rabias
O
FORTALEZA
Me tomaste
como cuando un pueblo
se toma las calles
exigiendo su derecho al amor
y a la alegría
me pusiste
en medio de tus cosas
y de tus sentimientos
me llevaste
hasta donde el lugar
empieza a perder el nombre
y las horas
su cuenta de minutos apremiantes
me diste
me das
lo que mis años
no alcanzan por sí solos
conduciéndome
por los caminos de tu cuerpo
hasta el fondo de las cosas
y la otra cara de la vida
que no conozco.
Del libro Confieso estas ternuras y estas rabias
L
REGRESO
Esta lluvia copiosa
tiende a borrarme el rostro
pero la ternura
me nace de estas calles elocuentes
y me devuelve la apariencia.
Del libro Confieso estas ternuras y estas rabias
V
HORMIGUEO
Tiemblo
de pies a cabeza
cuando me descubro
en la mirada del que me odia.
Del libro: Confieso estas ternuras y estas rabias
H
LA ACTRIZ EN EL CAMERINO
Con el lápiz labial
borra el último beso del hombre que amó.
Delinea el ojo que retuvo la lágrima
hasta el último momento
con lentejuelas viste el cuerpo
abandonado.
El polvo de las mejillas
cubre la palidez de tristeza
y el espejo se burla mostrando con descaro
a la que en un momento
cantará agonizando
sonreirá agonizando
hará la venia agonizando
y finalmente
recibirá flores
no para la actriz que triunfa
sino
para la mujer que acaba de morirle
al sentimiento.
De Las preguntas indeseables
Cl
EL MENDIGO EN LA PLAZA
Ya no tiene cuerpo
sólo mirada con legañas
párpado y odio rancio
Ya no tiene ropa que le cubra
sólo pedazos de historia recortada
que nadie supo nunca y al fin y al cabo
a nadie le importa.
No será invitado al banquete
ni irá al cielo.
Ya no tiene cuerpo
sólo una mano extendida
en la que no caen monedas
sino
gotas del último aguacero.
Del libro Las preguntas indeseables
A
CÓMO FUE
(Beny Moré)
Que un día todos los pechos se incendiaron
que las piedras no eran piedras sino rabia
uniformes escolares
teñidos con un plasma enardecido inigualable
que las calles no eran calles
sino gente desgarrada adolorida impotente
que la bandera no era tela sino carne y huesos
hiel en las paredes miradas punzantes
que Panamá era violada
piel de púber al borde del disparo.
¿Cómo fue que algunos olvidaron?
Del libro Las preguntas Indeseables
N
TODAS
Nosotros no morimos
nos mataron.
No queríamos ser mártires casuales
vago recuerdo de lágrimas anónimas
¿qué manera es ésta de entender la patria?
ya no construimos nada
ya no andamos
sólo nos quedan estas voces
que lanzamos para que nadie olvide.
Del libro Motivos generales
O
MOTIVOS GENERALES
Un hombre se sube
al caballo del poder.
Se llena de santos y misterios
acumula estrellas
robadas en el cielo de lo falso.
Cada noche emprende ritos ancestrales
suma calcula resta divide
oscuro y cada vez más solo
entre súbditos y hienas.
Convierte el territorio en una selva
en un mapa militar ensangrentado
una razón de guerra partida en dos mitades.
Entre cantos antiguos
y humo de velas coloridas
entierra su pasado
y otros tantos desengaños.
Venga en silencio lejanas orfandades
y jaurías de enemigos
construye para sí un universo propio
escondiendo su perpetuo exilio de la vida.
Un hombre se va pudriendo por dentro
juega con la bandera de otros
como el gato y la madeja
grita amenaza cierra puertas
manipula la fe de los que acuden
al llamado de una patria
amenazada y sola.
Ofrece la sangre ajena
como si de un fino licor de sus bodegas se tratara.
Pero un día
la muerte llega desde fuera
por sorpresa en la mitad del sueño
con su tecnología monstruosa y efectiva
arrasando niños cucharadas y polvo
en su magno experimento.
Un hombre se cae
del caballo del poder
aparatosamente
mira los escombros las traiciones los despojos
se siente acorralado
y le pregunta a los dioses
por qué lo abandonaron.
Los dioses
no pudieron creer tanta barbarie
se taparon el rostro
y huyeron
por la puerta del fondo.
Del libro: Motivos generales
L
HABRÁ QUE RECOGER EL CORAZÓN
Habrá que recoger el corazón
del sitio en que cayó esa madrugada
y coserse una sonrisa
para atravesar el muro.
Habrá que enterrar ciertos recuerdos
allí donde no puedan allanarlos
en algún rincón de la memoria
y abordar el dolor de otros comienzos.
Habrá que esconder el estupor
y jugar a ser sobrevivientes
barrer los escombros como si nada
festejar este bautizo
donde hasta Dios estuvo ausente
restañar esta herida que nos sangra
con esperanzas clandestinas, de esas
que siempre le nacen a los pueblos.
Habrá que cantar bajito
como los niños cuando juegan solos.
Lo que no habrá que hacer
bajo ningún motivo
es olvidar
envejecer
y rendirse.
Del libro: Motivos generales
V
CUESTIONARIO
Aquí donde he crecido
cargando mis piedritas de conciencia
y falsa valentía
los niños me preguntan por la historia.
Hablan de tumbas y desconocidos
de guerrilleros fusilados y mártires ignotos
de huelgas de inquilinos y epidemias varias
de barcos y tratados.
Me preguntan por balas extranjeras
y dolor en los patios
por nombres y bordados
de calles y aeropuertos.
Y no puedo contestarles nada
las bombas me han quemado la memoria
horadaron las balas mis certezas
la palabra patria
no sé dónde cayó
en que parte del incendio
se consumió sola e inútil
como un periódico viejo
comido tiempo ha
por los insectos.
Del libro Motivos generales
H
NOCTURNO
De noche me despierto en sobresalto
los lobos del insomnio me muerden los talones
allí arriba
la luna no deja de ser luna
en el mismo cielo
derramando su leche generosa como siempre.
¿Qué ha cambiado entonces me pregunto?
¿Será tu ausencia la suma de todas las ausencias?
o esa vieja canción que trae sombras y fantasmas
que la pena o el temor ya no mencionan?
Tal vez es el vacío
que dejaste en la cama
o la bandera que nos falta en la punta del alma
o esos titulares del odio y la rapiña
que no dejan huesos sobre nada
en esta ciudad sin brillos
ni ademanes.
Del libro Motivos generales
Cl
VOZ TERCERA
Aquí en este yacer inútil
y sin claves
la muerte nos muestra sus ventajas.
Somos todos iguales:
iguales en el silencio de las tripas
en esta inmovilidad del cuerpo
es esta levedad pasmosa
donde nada duele ni arde.
A quien pueden dolerle nuestros huesos
reposando en esta fosa común
donde llega el aguacero cada tanto
a ocuparse de nosotros
y las botas extranjeras nos custodian
para cerciorarse
de los auténticos de esta ausencia
no pedida.
¿Quién pagará por ver nuestras roturas
nuestro camisón descolorido
que se tiñó de rojo y humo
nuestro miedo de última hora
quién nos hará noticia?
que la patria
no se construye sobre sus cadáveres
¿para qué tenerla si sólo será un experimento?
si al final
sólo seremos una fotografía de rostros desangrados
que nadie reconoce como propios?
Del libro Motivos generales
A
AGONÍA DE LA REINA
I
Darte la vida en estallidos de la carne y perderme en ello
fue la máxima consigna que coronó el universo en mis
cabellos.
Cruce del cielo y del infierno mi vestido de flores.
Me di en las cascadas de tu aliento
en la luz derramada por los vasos de tu día.
En la efervescencia y la pólvora
con el dolor surcando los contornos de este tiempo.
Limpié lágrimas y escombros después de las conflagraciones
con una caravana de fantasmas cruzándome la calma.
Sembré las flores arrancadas de mi risa
y te puse con ellas un jardín en el pecho.
Del libro Agonía de la reina
Premio Ricardo Miró 1994, sección poesía.
N
AGONÍA DE LA REINA
II
Cuando un pedazo del sol agonizaba en mi ventana
y tus ojos miraban caer meteoros de cruda lejanía
yo contaba los hijos que perdí en guerras sin nombre
los animales enjaulados en mi boca
y los días vagabundos
con el musgo entre mis piernas que no tuvo sello.
Barcos fantasmas vi partir desde mi cuerpo.
Mordí la ácida fruta de los nocturnos desamparos
y las horas incrustaron alfileres de veneno
en mi carne fugitiva.
Del libro Agonía de la reina
Premio Ricardo Miró 1994, sección poesía.
O
AGONÍA DE LA REINA
III
De esperarte se gastaron mis sentidos.
Llovió edad sobre mi pelo y la mirada se me llenó de humo.
Dejaron de saltar los arlequines de mis manos.
Aprendí a no pestañear en los eclipses.
De mi falda se marchó el olor de crisantemos
y el carrusel de mi risa se convirtió en silencio.
Rota la cabalgadura que cargó mis esperanzas
prófuga gris en su evasión perfecta
en su tristeza yace como tenía que ser
en un ovillo de huesos sin sustento
sobre una mezcolanza de plomo y de ceniza.
Del libro Agonía de la reina
Premio Ricardo Miró 1994, sección poesía.
L
DESPERTAR DE LA DONCELLA
(Fragmento)
Hay momentos en que el aire es un proyectil en los pulmones.
Pero el camino se alarga en su canción de siglos y el candil
se apaga si nuestra pasión se escapa.
Decido entonces calzar las sandalias del milagro.
Llenar la mochila vaciada en el último viaje hasta lo inútil.
Sembrar las flores que nos faltan. Colgar nuevos panales
en mi boca y dejar que la lluvia se lleve las miasmas
de la pena. Buscarte hasta encontrarme. Inventar contigo
ritos nuevos. Señora de mis lunas y mis torpes estallidos
abro entonces un camino de arrieras en mis venas
y no admito los motivos de lo bárbaro
imponiendo su razón de muerte y vasallaje.
Del libro Agonía de la reina
Premio Ricardo Miró 1994, sección poesía.
V
ALEGATO DEL GUERRERO
(Fragmento)
Hicieron de tu majestad gatillo y daga.
Y también sobre ella mi condición de engendro. Habría tal
vez que buscar a los culpables. Los que fueron imponiendo
la mentira que creímos. Los que apuntalaron el falso rumor
de tu fragilidad y mi fortaleza. Para mí, el campo de batalla.
Para ti, el ignoto territorio de lo íntimo donde a menudo se
forman los dislates.
En tu corona se fraguó el equívoco y se enturbió el fulgor.
Quise amarte como sólo puede amarse a quien es cómplice y
comparte ese vacío que interrumpe un abrazo entre el mar y
el cielo. El encuentro cotidiano del día en su partida, con la
noche que arriba. La gestación con que agradece la tierra el
interminable milagro de la lluvia. Pero sólo me salieron
estas piedras que lancé a tu corazón. Este silencio que puse
entre los dos como un océano de cieno. Tu generosidad se
inundó también con lo minúsculo. Se convirtió en un círculo
rosa que se me hizo estrecho y me tentó a infringirlo.
En tu quietud de sombra se conspiró el abismo.
Del libro Agonía de la reina
Premio Ricardo Miró 1994, sección poesía.
H
EL PRINCIPIO FUE
El principio fue un desplome de la aurora sobre el mundo
Un inocularme el escándalo en el alma. Un coro de canarios
Saludando en ofertorio lo preciado y lo elegido.
Una fosforescencia en tus ojos en señal de bienvenida.
Un derrame de lilas en mi pelo naciendo de tus manos
El principio fue todo lo feliz que podía ser
Sin sombra de atroces vaticinios. Y entonces el amor
Era todo lo tangible y lo esperado. Un resquicio de alegría
Hacia soles permanentes.
Un rociar de pétalos en el medio de un juramento anunciado.
Cl
DE LA PROPENSIÓN A REÍR
Yo había llegado tarde al reparto de los dorados
dones.
Alguien que tenía prisa
olvidó una carcajada que me movió su cola.
Lástima me daba verla sin boca ni motivo.
La recogí aquel día memorable con cuidado
de madre
me la tragué despacio como quien traga espuma.
Desde entonces la risa me acompaña
me preserva del miedo a lo que se me esconde
de la vida sin abrazos
de sendero de ausencias adentro de mi pecho
y los cuchillos que clavan los formales.
No me permite distraerme en el lamento
ni autoidolatrarme.
Me mantiene alerta contra los infames
los que mintiendo humanidad destilan sombra
en jardines de hierro y fraude.
La risa recoge para mí
las flores que no alcanzo
y me ayuda a entender
la eterna vacuidad de aquellos que no ríen
por temor a que una carcajada enorme
se los trague.
A
A VECES
Suelo ser una mancha
con forma de ave o mariposa
un charco de minucias
un ramillete de olvidos
una canción rota por los lados.
Río a carcajadas
¿por qué no?
reír es una forma
de soltar los animales presos en el alma
entonces el rostro me cambia de forma
pierde su manera de tristeza mal copiada por los genes
imperfecto dibujo
con su medialuna y sus burbujas.
Lloro
¿por qué no?
cuando se bebe vino tinto
se tienen treinta y tantos años
y el mundo duele con sus cuatro esquinas artilladas
esta agua del ojo
justifica la pena de todas las ausencias
instaladas
entre la piel y los pasos.
N
DE LA PROPENSIÓN A LA PUNTUALIDAD
No es que haya nacido en otra parte.
Mucho menos que me preocupe el tiempo
en su belleza de abstracta redondez lunática.
Es que los minutos me muerden los talones
hormigas enfurecidas urgiéndome a hacer
a no detenerme en función de los finales.
Es muy cierto
la prisa es un agujero en la calma del insomne
una muralla en la planicie de los sueños
un abrevadero de ilusiones que a menudo fallan.
No es que me avasalle el miedo a la tardanza
pero la magia se me acaba
he perdido las fórmulas los jeroglíficos las pócimas
la clave de los secretos que guardaba
las cosas que el sabio Fritz confió a mis huesos.
Lo confieso
cada vez soy menos yo
y más lo que he vivido.
Por eso es que me apuro
para no llegarle tarde
a la que realmente he sido
cuando todo se acabe.
O
DE LA PROPENSIÓN A LOS SILENCIOS LARGOS
Llena de oscuridad mi boca es una piedra
en su inmovilidad oculta a los absurdos.
Huyo de mi lengua como de la ira
espanto las palabras para que no se posen
en el labio del niño que duerme
ignorando catástrofes y circos.
Las espinas de lo dicho
inundan la enorme gravedad del participio
y ningún verbo es voluntario
para rescatar el juicio o el prejuicio.
Acomodada entonces
en mi oficio transitorio de partícula
voy pareciéndome a la noche
protectora de ensombrecidos seres
que mataron el hambre con acentos
y calmaron su sed en los sepulcros.
El silencio es un pez en mi cabeza
felizmente alimentado con todas las palabras que no dije.
L
EPÍOME DE LOS NUEVOS AMANTES
Amó y se dejó amar. Tierno y sereno fue su gesto. Se hizo
Pequeño para caber en ti. Te hiciste inmensa para poder
Abrazarlo en los caminos donde todo converge y donde todo
Se ilumina.
V
CONTRAPIEDRA
Alguien dice mi nombre y se revienta la boca.
Alguien toca a mi puerta y se deshace en humo.
Alguien recuerda mi rostro y su azul se vuelve hiedra.
Ésta que soy es muro que llega hasta el cielo y no regresa.
Olvido que se hace espuma
mientras en las terminales
hombres de fe perdida
agonizan contra puertas que nadie abre.
No pido clemencia porque nada tengo.
No pido disculpas porque ya hace tiempo
los vicios ejecutan su danza de abandonos.
Mi mariposa del tiempo se convirtió en murciélago
duerme colgado en el techo nocturno
de una ciudad cualquiera.
La vergüenza bebe en los bares su licor amargo
y yo beso la llaga de los condenados
para que nadie diga que no pagué mis deudas.
Para que nadie diga
que me evadí del mundo
y de sus penas.
Perdonen padres míos por aquello que no soy
que no seré.
Ni la perversa calma de la que se quedó esperando.
Ni la perfección ilusa de exactas medidas.
Ni la erudita impecable polvo de academia.
Ni la que en fama y lentejuela cose sus vestidos y sus horas.
Ustedes ya lo sabían cuando me vieron nacer
Llegué muerta de la risa y sin suficiente tamaño
para ser aeromoza
por lo que me hice soberana de la tierra y la quimera.
He preferido ser
Una bala en el ojo de los torturadores
una mosca verde en la sopa de los indiferentes
un dolor de muelas en la noche de los conformistas
pan de maledicencia en los corrillos exclusivos
esperanza del pobre que nunca termina
una mancha en el expediente de las glorias estéticas
mala palabra para los poderosos y sus damas perfectas
Indocumentada sin salvoconducto hippie trasnochada.
La que repartió sus haberes entre los pobres de espíritu
comunista maldita o cristiana proscrita
dueña improbable de los discos que ya nadie suena
nombradora de los gatos en la esquina
abanderada de las fotografías viejas
ama de los colores.
Lo siento padres
A pesar de su bondad y sus esfuerzos
No soy más que la espina de la rosa
Y a veces, también la rosa.
H
YO ERA UNA CASA
Yo era una casa que casi se cerraba
Antigua memoria de los besos
Caricia en el exilio
Mar calmo y ya de vuelta
Entonces fuiste tu
Abriendo mis ventanas
Colocando los pasos la mirada
música de la ternura en tu mano dulce
espantando el polvo del desgano
una que otra palabra y el abrazo
ilusión imperfecta
un minuto en la vida
oportunidad serena
para ensayar el amor y sus desgarros
Ahora tengo que olvidarte y no sé cómo
Recuperar el mecanismo de la calma la música del mar
Y su complicidad inmensa
El perfecto balance de todo lo logrado
En todo caso antes que la noche llegue
Aquí siempre habrá lugar para tu rostro
Un espacio vacío para que lo llenen tus brazos o el recuerdo
Un silencio tendido para que tu canto vuele a lo más alto
Aquí.
Ver programa de televisión sobre la poeta Consuelo Tomás.
PRÓXIMO PROGRAMA JUEVES A LAS 22 HS (HORA ESPAÑOLA)